El Palacio da Pena se trata de una escenificación llevada hasta el extremo del ideal romántico, de su particular visión de la naturaleza, y la apoteosis de la arquitectura y el arte concebidos como elementos de evocación.
Este espectacular palacio se eleva sobre las más altas cimas de la Sierra de Sintra. Construido en el siglo XIX, el palacio se levantó sobre las ruinas de un monasterio preexistente: el monasterio Jerónimo del siglo XV, que a su vez había ocupado el lugar de una capilla dedicada a Nuestra señora Da Pena.El medio físico original fue alterado a conciencia, con un bien medido desorden concebido para crear el marco “natural” idóneo. El arbolado ha sido sustituido por especies exóticas. Allá donde se mire aparecen fuentes, galerías y pabellones como la Cruz Alta, punto más elevado de la Sierra, y el Monumento del Guerrero, considerado el guardián del palacio.
El palacio se trata de la más fabulosa mezcla de estilos pasados que se pueda imaginar: gótico, renacentista, manuelino, mudéjar, oriental, todo ello dando forma a un edificio de aspecto acastillado en el que no faltan cúpulas coloreadas. El interior integra el claustro de dos pisos forrado de azulejos del antiguo monasterio jerónimo. Además, las diferentes salas ilustran a la perfección el estilo de vida y los gustos de estos personajes alucinados por la propia belleza que habían contribuido a crear.
